El Deseo Fundamental

Tienes tantos deseos en tu vida. Cuando eras un niño, deseabas un juguete y deseabas tener chocolates. Desde que eras un chico hasta ahora, ¿cuántos deseos se te han cumplido? ¿Cuántos? ¿Los has contado alguna vez?

Sí, tienes muchos deseos en tu vida, ¿pero has contado cuántos se han vuelto realidad? Entonces te enfermas y deseas, “Oh Dios, tengo que ponerme bien ahora.” Entonces te recuperas. Cuando estás viajando y te atrasas, dices: “Por favor, retrasa el ómnibus para que pueda alcanzarlo.” Entonces otra vez tu deseo se ha cumplido. Si pierdes algo, una vez más dices: “permíteme encontrarlo”, y lo encuentras. ¿No te ha pasado esto? Que dices: “Quiero un sari azul” Está bien, está disponible.
Oh Dios, dame un ascenso. Bueno, has sido ascendido. Dios, dame un trabajo; bien, has conseguido trabajo. ¿No? Hasta un niño, “Oh Dios, no he estudiado esta vez; por favor, haz que apruebe.” Está bien, has aprobado el examen
Si miras en tu vida y hay un vacío, si ves que no hay alegría, si tu vida no está llena de paz, si vagas perdido por ahí y por allá, entonces no has deseado lo correcto. Has pedido muchas cosas pero no has pedido por la cosa correcta.
Te diré algo: que el ir y venir del aliento en tu vida es una bendición. Este cuerpo humano es una vasija y el ir y venir de este aliento es una bendición para ti. Te ha sido dado por el creador. ¿Lo aceptas?

Maharaji